¿Qué deducciones existen en IRPF en el camino hacia la eficiencia energética?

En caso de realizar obras, es importante plantear que mejoras en la eficiencia energética se pretenden alcanzar en el inmueble, ya que es posible aplicar deducciones en la declaración de la renta. Existen tres tipos de deducciones en función de la obra realizada, por lo que, en primer lugar, es importante clasificar el tipo de obra llevada a cabo y el objetivo de eficiencia energética conseguido.

Las obras deben reducir la demanda de calefacción y refrigeración, reducir el consumo de energías no renovables (gas, petróleo, carbon, etc.) o han de consistir en una rehabilitación energética.

Aquellas obras que permiten reducir el consumo energético deben realizarse en la vivienda habitual o una vivienda alquilada. La rehabilitación en cambio también incluye las obras realizadas en plazas de garaje y trastero, siempre que se encuentren en un edificio de uso predominantemente residencial.

Para aplicar la deducción, debe acreditarse una reducción del consumo de calefacción y refrigeración en la vivienda de al menos un 7%, o bien una reducción del consumo de energía no renovable de al menos un 30%, y por supuesto, debe certificarse por el técnico competente tanto al inicio, como al final de las obras.

El plazo para la consecución de las obras se ha ampliado recientemente hasta el 31 de diciembre de 2023 (2024 en caso de rehabilitación), y los porcentajes de deducción son del 20, el 40 y el 60% respectivamente de las cantidades satisfechas, ateniéndose al máximo establecido en cada caso.

Llevado a la práctica, pueden surgir dudas sobre los gastos que dan derecho a la deducción, su contratación, los pagos y la aplicación de las mencionadas deducciones. Desde PLANA Abogados & Economistas podemos asesorarles ajustándonos a su caso concreto.